Coronavirus y riesgos de mercado
En estos días hemos asistido a un mayor contagio del COVID-19 (mejor conocido como coronavirus) en Europa y en particular en Italia. Puesto que creemos que hacer previsiones a corto plazo es imposible, queremos mostrarte cuál es la situación actual analizando los datos disponibles a día de hoy, aislando todo el pánico y el ruido mediático que se está difundiendo a una velocidad más elevada incluso que la del propio virus.
La tasa de mortalidad del coronavirus
Ayer el China Centers for Desease Control (CCDC) publicó la tasa de mortalidad del coronavirus por franja de edad sobre 44.000 infectados. El resultado es el siguiente:
Edad | Tasa de mortalidad |
---|---|
80+ | 14,8% |
70-79 | 8,0% |
60-69 | 3,6% |
50-59 | 1,3% |
40-49 | 0,4% |
30-39 | 0,2% |
20-29 | 0,2% |
10-19 | 0,2% |
0-9 | No fallecidos |
La probabilidad de morir de un joven de entre 10 y 39 años es del 0,2%, la misma probabilidad de morir en accidente de coche en un país desarrollado. Es cierto que los pacientes ancianos, sobre todo con patologías anteriores, son los que más damnificados. Sin distinguir por franja de edad, la tasa de mortalidad del COVID-19, exceptuando la provincia china de Hubei, es del 0,7% contra el 0,1% de la gripe común. Sin embargo, la gripe es conocida desde hace más de 100 años, por lo tanto, es muy probable que la tasa de mortalidad del coronavirus baje conforme los médicos puedan analizarla y ofrecer mejores tratamientos.
Los efectos sobre el crecimiento
El daño a la economía viene principalmente de las medidas adoptadas por parte de las autoridades de varios países, entre ellas: la reducción de la libertad de movimiento, el cierre de actividades, cancelación de eventos y el cierre de fronteras. En China, se prevé una ralentización del crecimiento en el primer trimestre de 2020 pero todavía no se habla de una recesión.
Además, algunos datos confirman que poco a poco la economía del dragón asiático está volviendo a la normalidad. Esto es debido a que el numero de enfermos en China ha empezado a disminuir por primera vez desde el primer caso detectado.
Sobre los mercados financieros
Los mercados han tardado en reaccionar al coronavirus. La primera caída relevante se registró en el día de ayer cuando en Italia el número de contagiados superó los 200 casos. ¿Por qué tardó tanto? Veamos primero el siguiente gráfico donde mostramos la evolución del rendimiento ofrecido por parte del bono americano a 10 años:
Como se puede observar, a partir de mitad de enero de 2020 cuando el coronavirus empezó a difundirse de manera importante en China, el rendimiento del bono americano empezó a descender. Esto significa que los inversores están apostando a que los bancos centrales adoptarán medidas extraordinarias (incluso una nueva bajada de tipos) para ayudar el crecimiento de la economía. Cabe recordar que en los últimos tiempos los bancos centrales no han desatendido las expectativas de los mercados y, por lo tanto, en caso de un empeoramiento económico global, es probable que los bancos centrales vuelvan a apoyar la economía.
Las carteras de Pentainvest
La caída de la renta variable del 24 de febrero ha asustado a algunos inversores. Esto suele ocurrir cuando una caída de mercado tiene un gran revuelo mediático, puesto que ayer casi la totalidad de los periódicos hablaron del desplome de los mercados. Sin embargo, es bueno saber que tan solo en los últimos 10 años ha habido más de 25 correcciones de la renta variable americana superiores a la que vimos en los últimos días.
La amplia diversificación de las carteras de Pentainvest ha hecho que la caída hasta hoy fuera muy limitada. En nuestras carteras la renta variable española y la italiana, que ayer cayó casi un 6%, tienen un peso inferior al 1%. Es por esto que, a fecha de 24 de febrero, todas las carteras Pentainvest muestran un retorno positivo desde inicio de año:
En el siguiente gráfico, mostramos la aportación de la renta fija en estos momentos.
Esta es una de las razones por la cual es importante incluir la renta fija en las carteras, aunque su retorno esperado sea bajo. Un buen asesor debería construir una cartera no solo mirando al retorno, sino también a la gestión del riesgo. Y para ello la descorrelación histórica entre la renta fija y la renta variable junto con las ponderaciones de cada clase de activo en cartera constituyen sus mejores herramientas.
Como siempre, acabamos recordando que sólo un horizonte temporal de largo plazo nos puede proteger frente a estas correcciones de mercado y que estaremos encantados de atender a cualquier duda que te pueda surgir.